En Cartagena, a finales de mayo, fue lanzada la iniciativa ‘Ciudad Caribe Colombia’. Apunta a convertir a la región, incluida San Andrés, en una plataforma de clase mundial a partir del eje Barranquilla, Cartagena y Santa Marta. La agenda es monumental. Concretarla implica movilizar a la Costa para hacer del siglo XXI el siglo de su despegue económico, social y cultural. Los retos son siete: competitividad e infraestructura, administración pública, desarrollo social, turismo y cultura, jóvenes líderes, educación e innovación y emprendimiento.
En esta apuesta, el Atlántico tiene que hacer un considerable aporte. Este departamento debe subir en el ranking nacional de competitividad donde hoy ocupa el puesto 8, por debajo de Bogotá, Antioquia, Caldas, Santander, Valle del Cauca, Risaralda y Cundinamarca, según el Informe 2015 del Consejo Privado de Competitividad (CPC).
En el reto de administración pública, Atlántico tiene que hacer un gran esfuerzo. Verbigracia, en el Índice de Gobierno Abierto (IGA), que elabora la Procuraduría General de la Nación y toma como referente el CPC en su medición sobre desarrollo institucional. El IGA es una herramienta que evalúa la gestión de los gobiernos territoriales en aspectos como control interno, gestión documental, visibilidad de la contratación, gobierno electrónico, rendición de cuentas y atención al ciudadano, entre otros, en el marco de los compromisos de Colombia para ingresar a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y de los desarrollos legislativos recientes en transparencia y anticorrupción.
En el IGA, en 2015, el Atlántico alcanzó 78,1 puntos superando el promedio nacional de 70,7 sobre 100 puntos. Sin embargo, el 70% de sus municipios se siguen rajando. Así lo muestra un estudio de Protransparencia, elaborado por el economista Javier Palacio Trillos. 16 municipios, de 23, están por debajo de los 60 puntos en el IGA. De los 16 rajados, los más graves son Candelaria, Manatí y Luruaco.
Las variables que más arrastran el IGA hacia abajo son: Gestión documental (que implica implementar la Ley General de Archivos), Visibilidad de la contratación y Gobierno electrónico.
Atlántico estaría peor si no fuese por el peso ponderado de Barranquilla en el cálculo del IGA, que equivale al 50% por el tamaño de su población. La ciudad ocupaba el puesto 679 entre 1.101 municipios y logró escalar al 61 en el ranking nacional, jalando, de paso, al Atlántico del puesto 20 al 9.
Como vemos, Barranquilla encabeza el IGA, y le siguen, en su orden, Santo Tomás, Puerto Colombia, Sabanagrande, Piojó, Juan de Acosta y Sabanalarga.
Si Atlántico quiere subir en competitividad tendrá que invertir bastante en sus servidores públicos y en tecnología. Sin voluntad política, imposible
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